Junio 01, 2022
Seguramente has pensado en algún momento adquirir un préstamo bancario, si es que ya no lo hiciste. Pero ¿Cuándo es necesario recurrir a un préstamo con el banco?, ¿De qué manera es beneficioso?, ¿Cuáles son los intereses y riesgos de dichos préstamos? Todo lo que necesitas saber, lo veremos en este artículo.
Para iniciar, ¿Qué son los préstamos bancarios?
Un préstamo bancario es la operación según la cual la entidad financiera pone a disposición del cliente una determinada cantidad de dinero, estipulada previamente, mediante un contrato con el que dicho cliente adquiere la obligación de devolver el dinero en un tiempo delimitado. Así como el monto de los intereses que conlleva el préstamo.
El préstamo se otorga no sólo a personas físicas, sino también a empresas y empresarios. Con el propósito de mantener la condición financiera o proporcionar fondos para el desarrollo de la misma.
También es importante que conozcas los siguientes términos:
- Capital: cantidad de dinero solicitada al banco.
- Interés: precio que el cliente paga a la entidad por disponer del capital prestado.
- Plazo: periodo de tiempo estipulado en el contrato para devolver el principal más el interés.
Entonces, hablemos del porcentaje de interés de los préstamos bancarios
El préstamo es sin duda una alternativa para concretar tus metas, pero no debes tomarlo a la ligera; para evitar caer en finanzas negativas y deudas, es importante estar consciente de los pagos que debes realizar y si estos están dentro de tus posibilidades.
Por ello debes conocer los intereses del mismo. Aunque, por lo general, las entidades financieras brindan los números generales del interés y el tiempo a pagar, es importante entender de dónde vienen y ajustarlos a tu realidad de ingresos mensuales.
El banco debe otorgarte los montos verídicos de los intereses, pero si quieres comprobarlo por ti mismo, puedes hacerlo mediante el cálculo, tomando en cuenta si el interés es fijo, variable o mixto, te dejamos este link para que puedas calcular la tasa de interés de tu préstamo.
Préstamos bancarios a largo plazo
Cuando hablamos de préstamos a largo plazo nos referimos a aquellos que tienen un vencimiento superior a un año, es decir, que puede devolverse en cuotas cuyo periodo de pago exceda los doce meses. Generalmente, las tasas de interés en estos préstamos son mayores, así como los requerimientos para que te lo otorguen; suelen exigir nóminas, avales o documentos que acrediten la solvencia del cliente, por ello, la mayoría de los postulantes son emprendimientos, pymes o grandes empresas.
Ahora, ¿Qué es un crédito bancario?
Un crédito es una forma de financiamiento flexible la cual permite acceder a la cantidad de dinero prestada según las necesidades de cada momento. El crédito establece un límite máximo de dinero, dentro del cual el cliente podrá ir disponiendo parcial o totalmente de él. Puede ser que el cliente use todo el dinero concedido, solamente una parte o no utilice nada. A diferencia del préstamo, los intereses del crédito suelen ser más altos y a medida que se devuelve el dinero se podrá seguir disponiendo de más, siempre que no se supere el límite fijado. Generalmente el crédito se renueva cada año para seguir permitiendo que el cliente use esa línea de financiación cuando lo necesite.
Llegados a este punto, ¿Cómo funcionan los créditos bancarios?
Como todo préstamo, la persona o empresa debe acudir a la entidad crediticia con una solicitud formal. En ese proceso, lo más recomendable es que cotice al menos tres alternativas diferentes para comparar (monto de financiamiento, plazos, cuotas, tasas, gastos operacionales, seguros adicionales) y que tenga todos sus antecedentes personales y financieros al día y a mano para hacer más expedito el trámite.
Una vez que se recibe la solicitud y que el cliente hace entrega de la documentación de respaldo personal, la institución analiza los antecedentes financieros, en un proceso conocido como Análisis de Riesgo. Después de esta evaluación, se determina si se podría hacer realidad el crédito en cuestión.
De ser así, la entidad emite el crédito y el dinero es entregado directamente al vendedor del inmueble. Es decir, quien pide el préstamo por lo general no accede directamente a éste y sólo debe pagar la cuota, en caso de que sea un crédito hipotecario, por ejemplo; a diferencia de uno comercial o de consumo, monto que es depositado en la cuenta corriente del deudor. Todo dependerá del tipo de crédito que desees solicitar.
¿Qué puedo hacer si adquirí un crédito, me atrasé en el pago de las cuotas y ahora estoy en una etapa de sobreendeudamiento?
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